lunes, 28 de febrero de 2011

Buteo y otra vez buteo

Foto: Juanjo Bazán

Mallorca al ser una isla situada en medio del Mediterráneo occidental recibe más que su parte proporcional de migrantes presaharianos. La insularidad hace que cuando haya una entrada poco habitual de una especie, salta enseguida la alarma.


Este invierno le ha tocado el turno de invasor al ratonero Buteo buteo. Esta rapaz llega a ser bastante común durante el paso migratorio, pero su estatus oficial luego pasa a ser de invernante escaso. Este invierno desde el pasado mes de diciembre, muchos pueblos mallorquínes tiene su propio Buteo, algunos de ellos haciendo de centinelas a la entrada de los pueblos en cuestión, posados sobre algún poste de electricidad en las cercanías de alguna rotonda (todos sabemos que a los Buteos por algún motivo les encantan las rotondas...).

En los foros se habla del “Buteo de Sineu”, el “Buteo del puerto de Andratx”, el “Buteo de Búger”, etc...Muchos ornitólogos han salido al campo para encontrar el suyo. Incluso creo que ha habido algún concurso de quien tiene el Buteo más guapo. También se han unido a la festividad del Buteo nuestros compañeros de Ibiza y Menorca:

http://www.fotonatura.org/galerias/fotos/383423/

Se han observado hasta la fecha al menos 29 ejemplares diferentes, aunque seguramente habrá unos cuantos mas vagando por la isla. Agradecimientos a Lalo Ventoso por la recopilación de los datos:

Diciembre:

- 1 juvenil Maria de la Salut
- 1 Inca
- 1 Es Murterar (Alcudia)
- 1 Sa Pobla
- 1 juvenil afueras de Buger
- 1 Calvia
- 1 Ariany
- 1 juvenil Buger
- 1 Crestax

Enero:
- 2 Es Murterar (Alcudia)
- 1 Alaro
- 1 Consell
- 1 Aquacity (Arenal)
- 1 adulto Capdepera
- 2 Palma
- 1 Santa Maria
- 1 juvenil Sineu
- 1 juvenil Albufereta (Pollensa)
- 1 Costitx

- 1 juvenil Puerto de Andratx
- 1 Aeropuerto

Febrero:
- 1 Manacor
- 3 Arta
- 1 Puig d'Alanar, Manacor
- 1 Santa Maria

Ahora quedará ver si alguno de estos Buteos decide pasar aquí también la primavera en vez de volver al norte, y luego quién sabe... Se rumorea desde hace un par de años que puede haber alguna pareja criando en la sierra de Tramuntana. Vamos a ver que pasa... Aunque ya he visto un par de los ratoneros, aún me queda encontrar mi propio Buteo...

sábado, 19 de febrero de 2011

California!

Hace poco que he vuelto de una pequeña vuelta de dos semanas por California. Un viaje en principio no destinado demasiado al pajarereo y más bien ligado a un reciente cambio de estado civil…


Dejando atrás el mal tiempo que hemos tenido estos últimos meses en Mallorca y consecuentemente poco salir al campo, nos plantamos en San Francisco. Una ciudad bonita y curiosa construida sobre una península que guarda la entrada de una enorme bahía rodeada por unas montañas cubiertas de bosque de sequoias impresionantes, muchísima zona verde y marismas petados de aves.

Un paseo por la orilla hacia el emblemático puente del Golden Gate es suficiente para ver una lista nada despreciable de especies. Si lo estáis preguntado, la respuesta es no, no tuvimos la suerte de presenciar ningún suicidio en el puente…alucinamos bastante al enterarnos que cada semana se tira alguien…30 personas de media al año!! ..con las aves que se pueden ver desde el puente!!…no lo entiendo....hasta las gaviotas son interesantes. Hay gaviotas…muchas gaviotas, y podemos diferenciar unas cuantas especies diferentes entre las bandadas que sufren mucho de exceso de confianza. Larus heermanni, Larus delawarensis, Larus californicus y Larus occidentalis entre otras.

Entre los arbustos reclama otro bicho confiado, el Zomotrichia leucophyrys, parecido a un gorrión común, y por los jardines el colibrí residente Calypte anna.

Por las marismas una pesadilla de limícolas (las limícolas siempre han sido mi pesadilla..), incluso peor que un buen día de migración en S’Albufera de Mallorca. También un buen número del equivalente californiano de nuestro cormorán moñudo, el Phalocrocorax auritas o Double-crested Cormorant, traducido al castellano cormorán doble moñudo….sí, es verdad que a los americanos les gusta tener la última palabra…

Al ser invierno con un clima similar al nuestro, también encontramos invernantes interesantes en la bahía de San Francisco, sormomujos Aechmophorus occidentalis con gran presencia y algunos colimbos Gavia immer entre otros.

El invierno no es el mejor momento para visitar California ornitológicamente hablando, la zona de San Francisco tiene fama por ser un corredor migratorio importante durante primavera y otoño, sobre todo de rapaces. La gran mayoría de las pequeñas aves insectívoras migran al sur para pasar el invierno. En cambio la zona recibe una cantidad de especies “presaharianos” de forma similar al Mediterráneo precedentes del gran norte americano. No es de sorprender que muchos son de la familia turdidae. Uno que vimos con frecuencia fue el Ixoreus naevius, un especie de zorzal común que parece haber tenido una pelea con una naranja.

De la misma forma que me quedé impresionado con la forma de gestión de los parques en Australia, los parques de California están muy bien organizados. Bastan 20min de coche para salir del bullicio de San Francisco hacia el norte a Marin County y Punta Reyes o hacia el sur subiendo por la sierra de Santa Cruz al parque Big Basin para encontrarte rodeado de bosques de sequoias enormes, algunos con 2000 años de antigüedad. Sólo te encuentras gente los fines de semana. Hay senderos muy bien indicados y puntos de información útiles. Los “Rangers” muy dispuestos a contarte qué bichos ver y dónde encontrarlos.

Entre San Francisco y Los Angeles el Highway 1 se mantiene pegado a la costa pasando por el Big Sur. Esta ruta es la alternativa a la aburrida autopista que une las dos ciudades en 5 horas. Por la Highway 1 tardas 12 horas, pasando por parques y pueblecitos costeros. Por la carretera se puede pajarear sin salir del coche, multitud de ratoneros, Buteo jamaicensis y Buteo lineatus son habituales de los postes de luz. También azores Accipiter striatus cazando por los margenes de la carretera. El paisaje inspira, bosques, acantilados, montañas…. Como he dicho no hay falta de parques, muchos incluyendo playas dónde te puedes pasear entre elefantes marinos (bueno, si quieres….) y ver la amenazada nutria marinas entre las olas. También mucho pato marino, “surferosMelanitta perspicillata. Ver estos bichos como torean las olas te hace pensar sobre el origen de este deporte…


Los Ángeles tiene poco que ofrecer al no ser que te guste el caos circulatorio, la contaminación o kilómetros y kilómetros seguidos de cemento aburrido. Todo cambia al salir de esta mega-urbe hacia Las Vegas atravesando el desierto de Mojave. Es aquí donde te das cuenta de lo grande que es Estados Unidos. El único bicho vivo aparente es el cuervo, Corvus corax. Nuestro objetivo fue el parque nacional de Death Valley al noreste de Vegas. Este parque tiene casi el tamaño de Navarra para que os hagáis una idea de cómo se gastan los parques en este país. Hay mucha materia para criticar a Estados Unidos, pero insisto en que en temas de parques tienen mucho que enseñarnos. Death Valley se encuentra rodeado por dos enormes cadenas montañosas, esto junto al hecho de que parte del valle se encuentra debajo del nivel del mar hace que pocas veces lleguen frentes con lo que recibe super poca agua. El paisaje es increíble, otro planeta sacado de la Guerra de las Galaxias, y sólo le falta una cosas para ser el paraíso….aves. No oímos un solo “pío”. Nada de nada. En dos días enteros conseguimos ver solamente dos bichos marrones de poca descripción que bien fueron espejismos o bisbitas Anthus rubescens. Por supuesto los 50 Passer domesticus y 60 Sturnus vulgaris presentes en nuestro alojamiento en el centro del parque en medio de la nada no cuentan. El hecho de que Neil Armstrong al pisar la Luna por primera vez no vio ninguna de estas dos especies para mí pone en seria duda que no fuera todo un montaje. ...

Un bicho aparentemente presente en el parque es el correcaminos Geococcyx californianus. De hecho teníamos tantas ganas de conocerlo que íbamos preguntando a la poca gente local que nos íbamos encontrando por el mejor lugar para poder observarlo. “Están por todo” fue la respuesta general. Vale, OK….desgraciadamente no escuchamos un solo “Mek! Mek!” , ni fuimos adelantados en ningún momento por un relámpago azul….menudo chasco. El coyote sí que lo vimos, así como las nocturnas “ratas canguro”. La guinda en el pastel fue justo al irnos un turista en el parking del hotel con la ayuda de unas migas de pan, no solo consiguió ver un correcaminos, sino que además consiguió que le hiciera un pase de modelos! Vamos, que le sacó suficientes fotos como para hacer un “book”. Y todo esto a 3 metros de donde teníamos aparcado el coche….. La próxima visita contrataré la ayuda de ACMI ...

California...vale la pena, pero hay que ir con muuucho tiempo para poder empaparte de su grandeza ;)